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La negligencia médica que se vive en México se presenta en pacientes de cualquier edad, prueba de ello es la última noticia sobre una mala práctica médica que provocó la amputación de una extremidad del cuerpo. En este caso la víctima fue una recién nacida.n un hospital de Jalisco dependiente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) fue donde ocurrió la mala praxis. Todo comenzó cuando la madre de la pequeña llegó a la institución de salud para dar a luz a su hija mediante una cesárea.
Al terminar con el proceso los médicos revisaron a la recién nacida y se percataron que presentaba dificultades para respirar, por lo que indicaron a sus familiares que la niña debería permanecer en el área de cuneros hasta que se normalizara su respiración.
Cuando la madre pudo ver a su hija se percató que en su mano izquierda tenía un punto rojo, al cual lo rodeaba un aura de color negro, de inmediato preguntó al personal responsable cuál era la causa de esa lesión y ellos le explicaron que era el resultado de colocarle un catéter, y que tendrían que aplicarle un poco de óxido de zinc y podrían entregársela para llevarla a casa pronto.

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Al día siguiente la madre se percató que el punto de la mano ya tenía una consistencia muy dura y al señalarlo al personal retiraron a la pequeña para llevarla a revisión y ella ya no pudo tener contacto físico con la bebé.

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Al realizarle pruebas éstas demostraron que la pequeña tenía un bajo conteo de plaquetas por lo cual requeriría que se le administrara un antibiótico que no tenían en ese momento en el hospital, y que deberían traerlo desde la capital del estado.
Sin embargo, los medicamentos nunca llegaron y la infección de la bebé se había extendido y tuvo que ser trasladada de emergencia al Centro Médico Nacional de Occidente de Guadalajara. Al revisar el caso un grupo de médicos colegiados decidieron que la mejor opción de tratamiento era amputar el brazo izquierdo, ya que la mano ya presentaba coloración negra, lo cual indicaba que el tejido estaba muerto.
Para salvar la vida de la pequeña la madre accedió a realizar dicha intervención. Sin embargo, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) indicó que el personal médico no brindó la atención adecuada a la pequeña y que de haberlo hecho la infección pudo ser tratada con antibióticos y evitar así la amputación del brazo.

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Ante los hechos la CNDH solicitó que la menor fuera agregada al Registro Nacional de Víctimas para que pueda recibir una indemnización y además cuente con atención médica vitalicia para recibir rehabilitación.

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