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Cuesta creer que la negligencia médica pueda arrebatarle la vida a un ser querido o a uno mismo; pero cuesta más entender que entre los delitos que se cometen en México, este sea uno de los menos denunciados.

El fenómeno responde a múltiples causas, pero tres entre las más importantes son el desgaste físico, emocional y económico que supone este tipo de experiencia, el desconocimiento de las víctimas sobre sus derechos y la desconfianza en la autoridad por parte del sector de la población que sí es consciente de ellos.

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Por otra parte, llama la atención que la mayoría de las quejas sean presentadas ante la Comisión Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED), instancia que, si bien cumple la función de atenderlas, así como de ofrecer una indemnización simbólica, solo en algunas ocasiones tiene la capacidad para negociar que el médico o la institución de salud donde tuvo lugar la negligencia paguen por los daños ocasionados al paciente.

Diagnósticos erróneos, procedimientos quirúrgicos que se llevan a cabo sin el conocimiento o los cuidados necesarios, prescripciones equivocadas, olvidos, demoras e incluso malos tratos por parte del personal médico conforman el espectro de los delitos que se cometen día a día al interior de los hospitales públicos y privados del país.

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En circunstancias como estas, la búsqueda de justicia es más que razonable, sin embargo, nuestra educación en este sentido es insuficiente, pues cuanto mayor es el desconocimiento de las víctimas respecto a sus posibilidades de defensa legal, mayor es el daño moral y económico. Al respecto, Carlos Figueroa, abogado especialista en negligencia médica, explicó durante una entrevista concedida a El Universal que las personas afectadas terminan por buscar asesoría legal cuando ya han tocado todas las puertas sin obtener solución para su caso y han agotado sus reservas monetarias en hacer frente a las consecuencias de un mal tratamiento:

“La gente va a la CONAMED, pero es porque no saben que ese órgano no puede obligar a las partes a nada”.

Continuando con esto, el experto subraya la importancia de buscar asesoría jurídica como primer paso hacia una exigencia de justicia que incluya el pago de una indemnización proporcional al daño.

Lex & Co, como firma legal de la que está al frente Carlos Figueroa, pone a disposición de las familias mexicanas más de 20 años de experiencia en casos de negligencia médica. Haga su cita y permita a los expertos facilitarle el camino en este duro proceso.

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